El mundo del fútbol, por suerte, ya está abierto para todos los géneros. En el caso del fútbol femenino en el Club Villa Mitre comenzó a finales del 2019. La convocatoria a la primera prueba fue por más de 150 chicas interesadas en participar. El director técnico, Emanuel Montero, fue quien se comunicó con Sol Menéndez Perrone para que conforme el equipo, ya que la había visto jugar en la liga universitaria. Y confesó que “estaban sorprendidas de la cantidad de chicas que había”:

El comienzo fue complicado. A principios del 2020 empezaron con una pretemporada, la pandemia las interrumpió, por ende duró unas semanas y alcanzaron a jugar al menos un corto torneo de verano.

Cuando ya el aislamiento era inminente, hubo un apoyo colectivo entre cada una de las jugadoras para no abandonar el entrenamiento en sus casas, sumado a que el entrenador les mandaba la rutina que debían seguir. “También ayudando desde lo económico ya que muchas de las chicas lo necesitaban. Apoyándonos desde siempre, desde un principio y después todo se fue acomodando un poco más”, comentó, por eso mismo luego pudieron comenzar a entrenar por grupos, pasando ya a la “normalidad”.

Definiciones

“El fútbol femenino convoca a muchas, al menos en la ciudad de Bahía Blanca, aunque nos quieran imponer que no. Más lo que es Villa Mitre que también convoca mucho, es uno de los más grandes de Bahía, y eso también llama la atención a las chicas de poder estar representando al club”, expuso la deportista.

En la sociedad en la que vivimos, quizá podemos observar algunas dificultades para el género femenino de poder ingresar al mundo del fútbol. Según su experiencia, comentó: “Siempre soñé con volver a jugar la Liga del Sur, la jugué cuando tenía 11 años y volver a jugar fútbol once fue hermoso, más ahora con la edad que tengo, con mucha más experiencia y otro tipo de cabeza”.

 “En mi infancia me pasó que siempre tuve amigos varones que jugaron conmigo, me invitaban y me defendían ante cualquier cosa que me decían otros chicos, pero después cuando fui creciendo no tenía lugares a donde ir a jugar”, ya que sus amigos se encontraban yendo a clubes pero ella se quedaba en el barrio, jugando en los potreros, sin un lugar específico. “En la adolescencia la pasé bastante alejada del fútbol, lo único que hacía era educación física y algún torneo en el colegio”, añadió.

Luego cuando empezó a estudiar la carrera de profesorado en Educación Física volvió a estar un poco más cerca del deporte: “Ahí me pude acomodar, pero te van alejando al no tener un lugar para ir o al no conocer gente, y una misma se dice “esto no es para mi o soy la única. Pero te vas metiendo y te das cuenta de que no sos la única que juega a la pelota en la ciudad”, explicó.

Actualmente es goleadora de Villa Mitre, y sostuvo que cuesta entrar al mundo del fútbol siendo mujer pero lo que más cuesta es mantenerse, “por eso hay que lugar para que esta vez la Liga del Sur vuelva y no se diluya como me pasó a mí de más chica”.

Presente

El equipo local se está poniendo a punto para el comienzo del torneo, con fecha estimada para principios de marzo. “Sabemos que se agregan más equipos, eso es buenísimo para la competencia y saber que de verdad los clubes le están metiendo al fútbol femenino es muy importante para que las mujeres tengamos un espacio en el club y participemos en los deportes”, sostuvo la goleadora.

“Es un grupo humano hermoso, lleno de personas que quieren seguir aprendiendo. Chicas que desde que llegaron al club avanzaron mucho”, definió. Villa Mitre femenino se es famoso por haberle peleado el torneo a los sindicatos y salir segundas: “Fue un resultado espectacular porque solo tuvimos menos de un año de trabajo por estar cortado por la pandemia”, dijo la goleadora y cerró: “venimos de hacer un gran torneo y eso nos motiva a seguir creciendo”.

Autor: Redacción Ecodías