“Un
mundo con respuestas para todo sería también un mundo sin preguntas. Y también
sin esperanzas ni sueños. En otras palabras: es sólo en el terreno de la
incertidumbre donde nos está permitido macanear libremente” (Alejandro Dolina –
Revista Humor, abril 1984).

Tomando el contenido que expresa el pensamiento de Dolina, los sucesos que
tuvieron como protagonista al abogado, afiliado del Partido Comunista e
integrante del que fuera Banco Coopesur, Carlos Massolo, en la audiencia de los
Juicios por Crímenes de Lesa Humanidad en nuestra ciudad, tienen puntos de
contacto. Establecido su escenario personal para no dar respuestas, y tampoco
para que las preguntas tengan algún viso de credibilidad, establecen solo incertidumbres
y por tanto el macaneo (siendo condescendientes con él) libre. Sin embargo el
engaño no triunfó, y despojado de su disfraz podemos bucear en sus dichos.
Analizar puntualmente y en forma completa su declaración sería azaroso. Con la
selectividad pero sin la tendenciosidad (calificación mínima) que habló el
abogado Massolo, voy a referirme a los que entiendo son puntos fundamentales y
por tanto los más dañosos.
Primero decir que la ya inexistente Delegación Bahía Blanca de la APDH Nacional, se
fundó a impulso y decisión de Ernesto Alfredo Malisia el 31 de Agosto de1985
tal como figura en las actas fundacionales. Nadie que haya ocupado un cargo en
forma efectiva y oficialmente de la importancia de presidente, como menciona el
abogado Massolo, puede olvidar la fecha de fundación y hablar de haberlo sido
entre 1978 y 1979, eso no es olvido es engaño y mala fe, para colgarse una
chapa que nunca tuvo y mucho menos mereció, a la luz hoy de su condición de
haber sido TESTIGO POR LOS GENOCIDAS, la casualidad no existe.
En segundo lugar, identificar a Ernesto Alfredo Malisia solo como un simple
coordinador que recibía denuncias junto con estudiantes universitarios es
manifiestamente falso, y contiene toda una intención en si mismo de menosprecio
a quien fue prácticamente hasta su muerte conductor de la institución. Además
como se puede decir esto de Malisia si habla del año 1978/79 donde no existía
la institución. Espacio al que me incorporé extraoficialmente en diciembre de
1985, y en forma oficial como registran las actas en marzo de 1986. Compañero,
hermano y amigo a quien acompañé durante 17 años mientras TODOS poco a poco
fueron abandonándolo, y definitivamente luego de las leyes de impunidad en
1987. Debo decir también que desde mi incorporación, no ví más que de paso y no
más de tres o cuatro veces al abogado Massolo en todos esos años.
En tercer lugar, una mención verdaderamente encubridora del abogado Massolo. Su
argumentación en defensa al Poder Judicial local, como víctima del terror y por
eso rechazando los habeas corpus, cuando ese Poder Judicial era parte del
genocidio con el fallecido impune ex Juez Guillermo Federico Madueño, es
vergonzantemente cómplice. Mucho más al no denunciar su propio caso, tras la
excusa patética de “lo mío fue más liviano”, cuando supuestamente perteneciendo
al único organismo de DDHH se explicitaba claramente y desde sus inicios la
búsqueda de Justicia. Agravando definitivamente su “errática amnesia”, al no
recordar a Nelly De Lucchi, ex detenida desaparecida, ex afiliada del Partido
Comunista, ex empleada del Banco Coopesur, habiéndola asistido judicialmente y
conociendo de su liberación luego de haber sido masacrada en el CCD “La Escuelita”.
Redondeó su manipulada declaración, apoyado en el falaz argumento e intento
principista por el cual abandonó la Delegación Bahía Blanca de la APDH sucedida luego de una
supuesta visita de Graciela Fernández Meijide, a encolumnar a las delegaciones
para que no surgieran críticas por las leyes de impunidad del gobierno radical
de Raúl Alfonsín (integrante de la APDH Nacional por entonces). Esta situación en
realidad solo se conoció abiertamente en la APDH Nacional en
1988, con motivo de la asamblea anual y donde se debían elegir nuevas
autoridades nacionales y a la que concurríamos, Malisia como delegado titular y
yo como delegado suplente. Esa asamblea significó un debate durísimo por este
motivo, además de otros, que hicieron que comenzáramos a alejarnos de la APDH Nacional, y al
que se sumó el pedido de expulsión para Raúl Alfonsín de la institución
nacional por parte de Malisia, como presidente de nuestra delegación.
Carlos Alberto Massolo, abogado, afiliado al Partido Comunista, integrante del
Banco Coopesur, un mal recuerdo y un despreciable presente TESTIMONIANDO POR
LOS GENOCIDAS.

Eduardo A. Hidalgo
Ex Detenido Desaparecido
Militante de DDHH desde hace 27 años
Actual Secretario General de la Asamblea Permanente
por los Derechos Humanos de Bahía Blanca