El jueves 27 de septiembre se inauguró en el Museo Histórico Municipal la exposición “Viejas notas, nuevos acordes. Una historia de la música bahiense”, que propone un recorrido posible por la evolución musical experimentado por la ciudad durante el siglo XX.
En el armado de la misma se consideró a la música no sólo como una manifestación artística que tiene como objetivo suscitar una experiencia estética en el oyente sino también como una vía para expresar sentimientos e ideas, lo que la convierte en un producto cultural complejo y representativo de la realidad socioeconómica y política que atraviesa al proceso creativo.
Desde esta perspectiva la muestra fue antecedida por una intensa labor de recopilación de fotografías, publicaciones, publicidades e instrumentos, que luego de una labor de selección brindaron el sustento material de la exposición.
Asimismo, el equipo del museo recurrió a los relatos de los propios actores de los procesos y situaciones sobre los que gira la exposición, que fueron entrevistados y sus relatos registrados digitalmente para asegurar su perdurabilidad. Es por ello que la muestra constituye una instancia de exposición de elementos e imágenes y también una acción concreta en la recuperación de la memoria oral de la ciudad.
El recorrido se organizó a partir de cinco núcleos temáticos principales: rock, música clásica, jazz, folklore y tango, cuyos límites no siempre son precisos sino que en ocasiones se desdibujan conformando subgéneros eclécticos y dinámicos pero no por ello menos significativos.

Allá a lo lejos
Desde una lógica cronológica los primeros conjuntos musicales de la ciudad están ligados a las bandas y orquestas constituidas en la diversas comunidades inmigrantes en las últimas décadas del siglo XIX, que se insertaron en un medio dominado por una tradición musical ligada a un sustrato criollo e indígena. Luego con la llegada de los cinematografía arribaron a la ciudad los primeros músicos profesionales para sonorizar las películas mudas, muchos de los cuales organizaron los primeros conservatorios de la ciudad.
Posteriormente, la década de 1930 fue testigo de la formación de las orquestas de tango o típicas y de las características, que interpretaban ritmos de diverso origen. Ambas musicalizarían los bailes y las señales radiales hasta mediados de los años ‘60, cuando la influencia del rock comenzó a notarse.
En ese entonces se constituyeron en la ciudad los grupos iniciales que respondían a la influencia de la movida beat. En tanto que luego en los ‘70 la ciudad fue testigo de la conformación de las primeras bandas de rock nacional que componían sus propios temas, dejando de lado los covers que interpretaban sus predecesores. Luego, con el golpe militar de 1976, la coyuntura cambió iniciándose entonces un período de desarticulación de la movida rockera local. Con el regreso de la democracia en 1983 la situación mejoró y los grupos y tendencias musicales se multiplicaron.
Otro aspecto fundamental en la historia musical de la ciudad -considerado en la muestra- lo constituyen las diversas formaciones que antecedieron a la creación, en 1959, de la Orquesta Sinfónica y que dan cuenta de una extensa tradición de conjuntos y presentaciones, donde tuvo un lugar fundamental la Asociación Cultural, que por décadas trajo a la ciudad a los principales referentes de la música clásica internacional.
A su vez, el desarrollo del folclore bahiense presenta antecedentes en las primeras décadas del siglo XX, con un intenso desarrollo a partir de la década de 1960. De igual manera, dice presente el jazz, cuyos primeros mentores se ubican en los ‘40, momento a partir del cual la cantidad de músicos y conjuntos ha mantenido un ritmo constante.
Por último, es preciso destacar que esta exposición no pretendió lograr una visión totalizadora de la historia musical bahiense; por el contrario, fue pensada como un disparador de reflexiones, discusiones y replanteos que complejicen los procesos expuestos. Así, las recomendaciones, aportes y críticas de quienes la visiten serán considerados por los organizadores, buscando de esa manera dotar a la muestra de un carácter dinámico.