“En Bahía Blanca se estima que un 10% de la población son descendientes de
alemanes” cuenta Juan Maier, secretario de la asociación, que tiene su sede en
la calle Alberdi 3240 y funciona desde el 9 de agosto de 1995.

“Este año no hemos tenido mucha actividad porque normalmente arrancamos en
marzo pero por la pandemia no hemos podido. En la comisión somos 16 personas.
Por lo general nos juntamos a hablar de nuestra historia, hacemos comidas
típicas, música de acordeón, choperas; el alemán es muy divertido. Durante todo
el 2019 organizamos almuerzos todos los meses en la sede y compartíamos tortas
alemanas, canilla libre y cultura”.
Pirokk, apfelstudel, reibekuchen son algunas de las
comidas típicas alemanas más elegidas y el Koser es uno de los juegos
tradicionales que la asociación bahiense Alemanes del Volga lleva las
exposiciones y que suele levantar curiosidad y recuerdos.
“Muchas veces la gente piensa que nuestro origen en
ruso. Lo que pasa, es que los alemanes del Volga partieron a Rusia por un manifiesto
de la Zarina Catalina La Grande, que quería poblar con agricultores las orillas
del Rio Volga a cambio Catalina prometió respetar idioma, religión y los
exceptuaba de hacer el servicio militar.” Explica Juan y relata la dura
historia que atravesó esta comunidad marcada por política, guerras y
holocausto. Esto, lo detalla en la revista “Alemanes y sus Descendientes en la Argentina” que editó Juan y se
puede consultar en la Biblioteca Popular Bernardino Rivadavia.
El 5 de enero de 1878, llegaron los primeros alemanas
del Volga a nuestro país, eran ocho familias que llegaron a Santa María de
Hinojo, Olavarría. Luego fueron llegando distintos contingentes que se fueron
radicando en distintas zonas especialmente en Entre Ríos, Coronel Suárez, los
partidos de Torquinst y Patagones. Para saber más sobre esta cultura o poder
consultar sobre gastronomía se puede escribir al Facebook Asociación Bahiense
Alemanes del Volga.

STRUDEL DE MANZANA
Una delicia para preparar y disfrutar en familia, en esta temporada que
contamos con tiempo en casa.
En este caso, conviene preparar el relleno con anticipación, porque debe
reposar entre 4 o 5 horas. Hay que cortar
las 4 manzanas ácidas en rodajas y añadir 150 gramos de canela, 100 gramos de
pasas, el jugo de medio limón. Finalmente, agregar media cucharadita de azúcar
al aroma de vainilla. Poner al fuego la preparación durante 15 minutos, viendo
que las manzanas queden cocidas. Disolver la cuchara sopera de fécula de maíz
en un cuarto de vaso de agua y mezclar bien. Esto debe reposar 4 o 5 horas.
Para elaborar la pasta, amasar la harina, los huevos, el agua, el
vinagre y la sal. Formar 2 bolas y dejarlas reposar en una bandeja durante 1
hora. Después de ese tiempo, desenrollar las dos bolas de masa y estirarlas con
el rodillo, formando un cuadrado. Colocar el relleno en la masa y darle la
forma de un brazo de gitano. Finalmente, poner el resultado en una bandeja de
horno y hornear a temperatura media por espacio de 40 minutos.