Se reabrió el Museo del Deporte bajo la denominación de Memorial del Deporte.
Autoridades municipales y Asociación de Amigos inauguraron una nueva etapa
institucional.

El titular del Instituto Cultural, Ricardo Margo, confirmó que reabrió al
público el memorial del deporte bahiense ubicado en la planta baja de la torre
Bicentenario, antes conocido como Museo del Deporte. “No es que Bahía Blanca no
merezca un museo del deporte, sino que todavía le falta para alcanzar la
categoría que merece una denominación así, por eso sostenemos que es un
memorial, que para mí en algunos casos es más importante que un museo”, aseguró
el funcionario respecto a la denominación que sigue aunque polémica, ya está decidida
en el municipio.
En el mes de marzo, la coordinadora de museos, Marina Fuentes dijo a EcoDias
que “sí, va a ser trasladado a un edificio que pertenezca
al municipio o no, lo estamos evaluando”. El lugar que ocupa la institución
requiere un pago de alquiler que asciende a 40 mil pesos mensuales, suma que no
quiere afrontar la actual gestión municipal. A la fecha, no se consiguieron
instalaciones acordes a las necesidades del ahora Memorial del Deporte. Aunque en su momento, se levantaron voces que
aseguraban que se estaba evaluando su cierre. “Desde ya que no se
cierra, por supuesto que no”, salió a declarar Fuentes. “Por las
características de Bahía Blanca es una tipología que encuentra perfectamente en
esta ciudad, lo consideramos importante. Estamos evaluando un traslado o
traslados temporarios, que también podría ser, poner en salvaguarda gran parte
de los objetos del museo y armar guiones curatoriales flexibles que nos
permitan mover exposiciones en distintas sedes”. Estas últimas opciones por el
momento han sido descartadas. “Y ahora la etapa
de aquí en adelante no es solo reabrir en Drago 45, si no buscar un mejor
espacio. Un museo no puede estar en un lugar alquilado, y además merece mayores
dimensiones”, agregó Margo.

Inventario
Durante dos meses el sitio permaneció cerrado por inventario. Esta
semana Margo junto al presidente de la
Asociación de Amigos del Museo del Deporte, Roberto Bértora y por el ex
basquetbolista y promotor de la idea Atilio Fruet, señaló que “la preocupación
inicial fue la de reanudar la tarea, pero existían desprolijidades, por ejemplo
los elementos no estaban debidamente inventariados, sobre todo los prestados,
lo que representa una mayor responsabilidad. Ya se dio cumplimiento a esta
tarea”.
Los trabajos en relación al inventario, “esta
es una tarea que se realiza en cualquier museo del mundo, el cierre por
inventario para actualizarlo y ponerlo al día” describió Fuentes, especialista
en el tema.

Para recorrer
Las instalaciones del memorial determinan dos áreas definidas de exhibición
de acuerdo a la duración de las muestras. Una de presentación prolongada, de un
año o más de duración, para exhibir objetos del patrimonio de federaciones,
clubes o deportistas y otra, para muestras rotativas, mensuales o bimestrales,
que se enfocan en temas puntuales, como la historia de un club o una
federación, la trayectoria de un deportista en particular. Este último ámbito
también se utiliza para presentar actividades deportivas que se practican en la
ciudad. Cuenta con un bar temático, ambientado con varias vitrinas con copas y
trofeos de distintas épocas y distintos deportes. Esta forma de resolver la
puesta de objetos tiende a ser más atractivo el paseo y favorecer el encuentro
y la permanencia de los visitantes, como se puede ver al recorrerlo, que gran
parte del público permanece detrás de un café o haciendo alguna lectura de
material. Hay un escenario dedicado a debates, presentaciones, premiaciones,
homenajes y capacitaciones. La iniciativa de impulsar la participación de los
deportistas constituye una medida sostenida desde su inauguración.
Los visitantes encontrarán recuerdos fotográficos, indumentaria, testimonios,
trofeos y publicaciones gráficas de las glorias del fútbol, básquet,
automovilismo, atletismo y el deporte de la ciudad en general. Muchos de estos
materiales tangibles serán preservados en un depósito para tal fin, bajo
condiciones necesarias de humedad, luz y seguridad. La superficie del lugar
asciende a 500 metros cuadrados. La entrada es libre y gratuita.
Recordamos que la anterior sede se encontraba en Avenida Cerri al 800.
Inaugurada en el mes de octubre de 2011 durante la intendencia de Cristian
Breitenstein. En sus primeros años, estuvo abierto únicamente durante el fin de
semana. Por otra parte, en su vieja instalación sufrió un robo importante. En
la ocasión, durante el año 2013, se apoderaron de dos camisetas, una que vistió
a Juan Alberto Espil, ex basquetbolista en su última etapa en el seleccionado
argentino y otra perteneciente al futbolista Rodrigo Palacio, quien la utilizó
en la Copa del Mundo jugada en Alemania 2006. El año de cierre que implicó la
búsqueda del mejor lugar de instalación comprometió al personal municipal y a
los Amigos del Museo. Encontrar una sede adecuada fue una tarea ardua, porque
se había pensado una propuesta de bar temático, apto para todo público y para
que los turistas lleguen de forma cómoda según declararon fuentes municipales.
Más allá de su reincorporación al circuito turístico local, el memorial debe
resolver su instalación definitiva, su accesibilidad para personas con
limitaciones físicas y la designación de un titular, tareas pendientes para
esta gestión.