La información y el material que alberga, bajo el nombre “Cruzando el arroyo”, podría dividirse en dos partes: Por un lado, la correspondiente a la flora y la fauna autóctona del arroyo tomado desde que ingresa al partido de Bahía Blanca. Es decir, desde el Puente Canessa hasta la desembocadura en el Estuario, atravesando toda la ciudad.

En segundo lugar, “las historias. Lo que nos pasa como bahienses cuando cruzamos el arroyo. Hubo un trabajo muy fuerte de investigación con archivos sobre cómo fue la concreción del entubado, con informes que se buscaron en expedientes de la Dirección de Hidráulica de provincia y en el Municipio”, comenzó el director del lugar, Christian Díaz.

Asimismo, en el local también hay recortes de diarios y un trabajo documental que realizaron docentes y alumnos de la Escuela Normal, entre 2007 y 2008, sobre “El lunar de Bahía” o “Palihue Chico”, en lo que hoy es el Parque Boronat. En esa línea, el referente explicó que ese sector “en los años 70 era un asentamiento de varias familias que estaba entre las vías y el arroyo. En la dictadura militar los corrieron y trasladaron a Villa Harding Green. El relato de personas que vivieron en ese momento está en este documental”.

Integrar el conocimiento situado

En el piso del micro museo, hay un mapa de Bahía Blanca donde está destacado todo el curso del Napostá, y se puede apreciar cómo la atraviesa. Además, hay una muestra de ceramistas que realizaron piezas con la técnica del Raku, que consiste en el horneado de arcilla a bajas temperaturas. Para ello, los artistas bahienses, Rafael Cacho Martín y Tato Corte, utilizaron elementos del ecosistema local como, por ejemplo, arcilla del Estuario.

En diálogo con Ecodías, Díaz explicó: “La propuesta es una invitación a pensarlo como un ecosistema y a conocerlo a través de lo que cuentan los vecinos, profesionales de distintas disciplinas y lo que sucedió en las casas; y así ver cómo lo percibimos nosotros”.

Los y las visitantes también podrán consultar material sobre un balneario que, en la década del ‘30, había inaugurado el intendente socialista Agustín de Arrieta, en la parte entubada que está entre Brandsen y Darwin, a una cuadra del Galpón Enciclopédico, donde hoy es la plazoleta Ernesto ‘Che’ Guevara. Al respecto, el director de la institución contó: “Ahí había una pileta de natación pública y un dique, con agua del Napostá, que se había construido para la gente del barrio de Bella Vista. Para la década del 40 ya había sido destruida porque tuvo una serie de complicaciones, como la contaminación del arroyo que hacía que el agua no fuera apta para bañarse, y el dique presentaba alguna serie de problemáticas”.

UN 2024 DE PROYECTOS
Museos Caseros se extenderá por toda la ciudad: “Cada año, trabajaremos con personas que viven en un área objetivo de Bahía, que podrá ser tan grande como un barrio o tan pequeña como una sola calle. La intención es capturar la amplitud y profundidad de la vida en la ciudad hoy, junto a sus protagonistas, y disponer de esta vidriera para visibilizar variadas y múltiples temáticas”, concluyó Díaz.
El Museo es parte del Club Villa Mitre, ubicado en Caseros 1555. Quienes quieran visitarlo pueden hacerlo de lunes a viernes, de 9 a 13 hs.

Autor: Redacción Ecodías