Luego de girar por Capital Federal la banda bahiense Mother Funker volvió a la ciudad para presentar “Pez en gelatina”, segunda placa y sucesora de “Mother Funker”, que vendió 600 unidades en Bahía Blanca.
A la hora de hablar del tipo de música que tocan, sus integrantes, Nicolás Aispuro (voz), Maxi Hagg (guitarra) Darío Vega (bajo) y Leo Crocco (batería) coinciden en que no hay un estilo que los pueda definir del todo, aunque se nota que ronda entre el funk, en primer medida, el hard core y un rock más pesado: “Somos cuatro personas que escuchan estilos de música muy diferentes y de ahí salió el estilo que hacemos ahora. Las raíces son la música funk de los 80 influenciada por el rock actual”, comenta Maxi.
Formados en 2002, los Mother Funker fueron teloneros de bandas como Divididos, Las Pelotas y Kapanga en festivales de Epecuen, y últimamente se han presentado en Buenos Aires ya que, sorprendentemente, se hace más fácil para tocar que en Bahía: “Hace poco menos de un año que no tocamos en Bahía ya que no hay lugares, se nos hizo más fácil tocar en Buenos Aires que acá y eso que allá es jodido. Supuestamente tendría que ser más fácil acá. La repercusión en Capital ha sido muy buena, nos fue mucho mejor de lo que esperábamos”.

El disco como reflejo de una situación
La crítica mezclada con humor son dos factores sobresalientes del disco “Pez en gelatina” cuyo título se le ocurrió a Darío, el bajista y que tiene su explicación en la situación que viven los músicos locales a la hora de intentar expresar lo que hacen. Al respecto Nicolás explicó que “hicimos como una metáfora un poco loca de lo que pasa con las bandas de rock bahienses que están un poco como atrapadas, que no se puede hacer mucho, no hay lugares, no hay mucho apoyo, entonces fue un poco representar eso. Metiéndole también un poco de humor, es uno de los temas del disco y habla de eso. Todos los temas tienen un toque humorístico, son un poco más redondos y en las letras hay un poco de todo, básicamente mucha crítica y un poco de amor también”.
Por otra parte, Maxi nota cierto grado de madurez con la salida de este trabajo: “El primer disco quizás era mucho más experimental y este es un poco más redondo, lo que nota una maduración con respecto a nosotros cuatro. En el primero nos estábamos conociendo y ahora es como que tenemos controlados ciertos aspectos.”
Con la idea de difundir “Pez en gelatina” por donde más se pueda, los Funkers proyectan seguir tocando en Capital Federal pero sin olvidar las raíces: “Los objetivos son seguir con el disco, tocar muchísimo más, ver qué se puede hacer en el verano, de a poquito ir metiéndonos más en Capital, volver a la ciudad para la gente de acá y meter el disco donde sea y se pueda”.