Ocho proyectos para visitar, recorrer y
reflexionar en la Bienal Regional de Arte. Artistas locales y nacionales en una
exhibición con innovaciones de puestas y conceptos. Jorge Moyano, tutor de las
muestras, habló con EcoDias sobre las obras, los artistas y el montaje abierto
a todo público.

«Estos días son de una gran alegría, de una intensidad y un desgaste
feliz, genera fusilado a la noche pero sabiendo que se formaron un montón de
conexiones, de encuentro entre las personas”, resumió Moyano. “Los proyectos ya
se venían desarrollando, tuve la posibilidad y la suerte de ir acompañando el
desarrollo de los proyectos, de ir comunicándome con los artistas en estos casi
tres meses desde que fueron seleccionados hasta ahora, es decir que a muchos de
ellos pude entrar a los talleres, pude en los dilemas que les planteaba los
proyectos en sí, las dificultades técnicas, dificultades conceptuales. Con
otros el acompañamiento fue más a la distancia, sobre todo la gente de afuera,
aún así nos fuimos mando imágenes, textos. Desde este lugar de intimidad que es
para mí el lugar de tutor, seguir la labor de cada uno de ellos”.

Intensidad
“Esta semana fue de materialidad de esos proyectos, de una cosa que siempre
pasa en la Bienal pero que a mí me tocó disfrutarlo más este año: es que se va
generando un clima de colaboración, de interés, es una semana de pre muestra
porque ya vas contando, ya vas diciendo de dónde lo pensaste. El montaje y la
solución de algunas cuestiones técnicas llegan. Siempre hay algo para decir. La
pregunta es si este cambio le hace bien a la obra, si tiene que ver la obra
como estaba pensada desde hace un tiempo, la estimula, la hace crecer, la
achica. Y a la vez uno se va encontrando con expresiones de lo visual distintas
de lo que uno conoce o uno hace, para los artistas es muy enriquecedor y
divertido, se crean lazos, se proponen acciones futuras entre ellos”.
El rol del tutor no es específicamente curatorial. “Es rol abierto, que en
algún sentido da la posibilidad que uno vaya teniendo una mirada curatorial
sobre algunas cosas, uno puede opinar qué le hace bien al proyecto, cuál puede
ser su visualización, pero no necesariamente tiene que ver con eso. Si el
artista no plantea o no deja abierta la puerta para que uno intervenga desde
ese lugar uno interviene desde otro, qué necesidades tenés, querés que te vaya
contando qué me genera tu obra para ver si eso después te sirve. Esto de ser
tutor se va construyendo en cada Bienal, seguramente yo lo voy hacer distinto
que otros” afirmó Moyano respecto a su papel dentro de la exhibición. “Voy
tomando apuntes en un cuaderno de notas, haciendo un registro, un cuaderno de
campo que me ayuda a pensar y a que no se me escapen algunas cosas y eso fue lo
que propuse para algunos trabajos. Algunos proyectos solicitaron un
acompañamiento específico, más técnico y otros me pidieron que escriba algo,
una crónica frecuente de lo que vas viendo, porque no tenían dificultades
técnicas o porque tenían una cuestión conceptual tan definida que no hacía
falta que uno intervenga desde ese lugar. Fue muy variado el rol. A la vez
teniendo esta vinculación con lo institucional, que para eso está también la
figura de tutor, es viendo que van necesitando los artistas, si va precisando
textos, ajustar tiempos, especificaciones del proyecto. Entre museos y
artistas, entre talleres y artistas es el paseo que estuvimos haciendo este
tiempo”.

Son ocho
“Participan 8 proyectos, como siempre en los dos museos, con la particularidad
que en esta Bienal hay un proyecto y medio funcionando en el patio. Entonces
quedó espacio para los artistas dentro de los museos para que plantearan una
obra rica”.
Moyano es artista y trabajador social, “no vengo de una escuela de formación
tradicional sino más bien empírica, vengo encontrándome con la obra y vengo
encontrándome con las dificultades y temas artísticos desde mi propia
producción, entonces ver a otros producir y acompañar la producción de otros me
parece lo fue asumiendo desde este lugar de aportarles los que tengo y de mi
corta trayectoria de producir. Al mismo tiempo esto me permitió conectar con el
deseo, creo que si algo que pude aportar y con lo que me conecté en cada uno de
los proyectos es con el deseo de ser, que es el que yo busco como artista y el
que busco para alimentar la obra. Ir a un taller me dan ganas de volver al mío,
ver estos proyectos fue volver a mi taller a hacer obra. Mientras iba leyendo y
armando los proyectos fui escribiendo un proyecto propio o haciendo obra. Eso
es lo más genuino que pude aportar, me encanta hacer, me encanta producir y que
puedo decir a otro ´dale para adelante´”.
Desde una perspectiva muy enriquecedora, Moyano asegura que “desde un principio
fui a buscar un vínculo, son personas que tienen una vida y tienen el deseo
puesto en esto. Me comunico y en base a eso vemos cómo va el proyecto, por
dónde viene su búsqueda. En ese sentido, no me consideré obsesionado con la
presentación final y la verdad estuve más atento que el deseo estuviera ahí. La
presentación final es mucho más azarosa de lo que uno supone”. En cuanto al
montaje abierto, Moyano dijo que “eso es buenísimo, la gente entra, circula,
pregunta, también participan los técnicos, los que vienen a ayudar, amigos que
se van enganchando con las otras obras y artistas”.

SELECCIÓN
El jurado de la BRA2016 integrado por Laura Biadiu, Silvana Spadaccini y
Roberto Echen decidió otorgar los premios adquisición. El premio adquisición Municipalidad de Bahía Blanca para
Asociación para la Restitución de Patrimonio Artístico (ARPA) por el proyecto
de la filial local y el premio adquisición del Honorable Concejo Deliberante
para Jazmín Giordano, por el proyecto «Princesa forever».

VISITAR
Las obras pueden visitarse de martes a viernes de 14 a 20 hs. y sábados y domingos
de 16 a 20 hs. pueden visitarse en Sarmiento 450, sede del Museo de Arte
Contemporáneo y el Museo de Bellas Artes.