Ecos de la 42° entrega de los premios de la Asociación de
Periodistas de Televisión y Radio de Argentina.

La cita fue el domingo 27 de mayo a las 20:00 horas en el Salón Pacífico del
Hotel Hilton de la ciudad de Buenos Aires; fue transmitida por Canal 13 y
seguida por gran cantidad de televidentes, si nos atenemos a los 30 puntos que
habría sumado el siempre oscuro y parcial baremo del rating.
Cinco horas excesivas de duración, pero también inevitables en este de formato de
banquete-show, que sigue los parámetros del Emmy, su correlato “americano”.
Una fiesta que en sus cuatro décadas de rodaje ha mutado de simple reconocimiento
a lo mejor de la actividad televisiva y radial -en un injusto segundo plano- del
año precedente, a aparatosa rutina con breves momentos de emoción, ridículo o
escándalo.
Cuarenta y cuatro ternas, más algunos premios y tributos especiales que este
año tuvieron tres ficciones que se alzaron con los premios mayores: la tira El puntero -Canal 13-; el unitario El hombre de tu vida y la telenovela El elegido -ambos de Telefé-.
Las quejas por lo inadecuado de las categorías se renovaron alrededor del rubro
“Humorístico” -ganado por un programa de archivo como Zapping-, la mixtura el de “Interés general” -ganado por el envío
de viajes Clase turista– y el de “Miniserie”, que a pesar de
sus más de cuarenta capítulos ganó El
puntero.
Los bloopers correspondieron a las fallas de los micrófonos que molestaron a
los presentadores -un Roberto Pettinato y una Mariana Fabbiani correctos y de
estilos complementarios- e hicieron ininteligible buena parte de la introducción
de Carlos Alberto Sciacaluga, ignoto presidente de APTRA. Y a Susana Giménez, desplazada
intempestivamente por Miguel Del Sel al momento de recibir el premio -a Labor
humorística- en ausencia de Dady Brieva.
Lo imperdonable fue la impericia del homenaje a las figuras desaparecidas durante
2011, que puso en primer plano la interpretación de Raul Lavié de “A mi manera”
en lugar de los retratos y nombres de los fallecidos.
La polémica de tono político la planteó buena parte del equipo de Telenoche al recibir el premio a mejor
servicio informativo -que como de costumbre quedó para el canal anfitrión- y fue
respondida por Reynaldo Sietecase, al agradecer el suyo por mejor labor periodística masculina en
radio.
La dedicatoria más curiosa fue la de Pacho O`Donnel -a José Hernández-, al
aceptar su premio a mejor programa cultural en radio.
Y el momento saliente para los presentes en el Hilton que lo aplaudieron y escucharon
de pie y seguramente para los televidentes fue el premio a la trayectoria para
Juan Alberto Badia -el otro fue para el veteranísimo actor Max Berliner-, que a
pesar de su delicado estado de salud dio un mensaje de esperanza y amor a su
trabajo.
En resumen, una noche interminable en el sentido negativo del término, que cerró
con el Martín Fierro de Platino -adjudicado por voto del público- a un Antonio
Gasalla ausente sin aviso y dejó tras de sí más comentarios sobre el atuendo de
los asistentes, que recuerdos perdurables.