Antonella Costa paseo por la
cuidad su pasión por el cine.

La tercera edición del Festival latinoamericano de cine independiente de
Bahía Blanca se realizó del jueves 21 al domingo 24 de agosto e incluyó entre
sus actividades una retrospectiva de la filmografía -de más de veinte títulos- de
su invitada especial, la actriz Antonella Costa.
Un repaso bastante amplio que comenzó la tarde del jueves con El viento
(Eduardo Mignogna; 2005), donde interpreta a la atribulada nieta de Federico
Luppi y siguió el viernes con su film más destacado hasta el momento: Garage Olimpo
(Marco Bechis, 1999).
Curiosamente fue su primer protagónico -con 18 años y poco después de debutar
en un secundario de la comedia Alma mía
(Osvaldo Barone, 1999)- y su mejor film. Allí interpreta a una alfabetizadora
raptada por un “grupo de tareas” y sometida a todo tipo de vejaciones como
tantos otros durante la dictadura.
Una coproducción entre Argentina, Italia y Francia dirigida por el chileno Marco
Bechis, que en el elenco tuvo a la francesa Dominique Sanda, Érica Rivas y el
debut actoral de Enrique Piñeiro, hasta ese momento uno de los productores. Drama
clásico, con uno de los finales más evocadores del cine argentino.
El sábado Costa llegó a la cuidad y dio
una charla abierta en el Salón Blanco de la Municipalidad, que contó con bastante
público – al que ella agradeció la presencia con mucho humor- a pesar del clima
tormentoso.
El director chileno Che Sandoval -que esa noche presentaba su comedia urbana Soy
mucho mejor que voh (2013) con una participación de la actriz- fue su interlocutor
y dialogaron sobre el trabajo específico de la actuación en cine.
Un tema que abordó no sólo desde su experiencia ante la cámara, sino también
desde su reciente actividad como docente en ese mismo campo, acentuando las diferencias
con la actuación teatral y la necesidad de desarrollar modos efectivos de
enfrentar la cámara y sostener las emociones del personaje durante semanas, aunque
el cronograma de rodaje no suele ser lineal. Pantallazo breve e interesante,
matizado con anécdotas personales de sus filmaciones, que se completó con
preguntas de los asistentes.
Por la noche presentó en carácter de estreno la coproducción hispano
argentina Inevitable (Jorge
Algora, 2013), donde interpreta al nuevo amor de un atribulado Darío
Grandinetti.
Y el domingo siguieron la hispano uruguaya Mal
día para pescar (Álvaro Blechner; 2009) -que mereció el premio del público-
y otra coproducción -esta vez entre Argentina, México, España, Brasil y Reino
Unido- Cobrador (Paul Leduc; 2006)
con la globalización por tema, para despedirse durante la ceremonia de cierre
en el Teatro Municipal.
En conjunto, una participación activa, profesional y accesible que fue el punto
más alto del FECILBBA.