Se está rodando un film basado en una novela de Bioy Casares.

La literatura y el cine argentino sostienen una relación estrecha, no sólo porque los escritos de incontables autores han sido versionados sino porque ellos mismos han fungido como guionistas. Uno de los más ilustres nombres de entre estos últimos es el de Adolfo Bioy Casares (1914-1999).
La noticia más reciente que relaciona a Bioy con el cine es de principios de este mes, ya que el director Alejandro Chomski está rodando en Buenos Aires las últimas escenas -la mayor parte del rodaje fue en San Luis- de Dormir al sol, basado en su novela homónima. Con un elenco integrado por Luis Machin, Esther Goris, Carlos Belloso, Florencia Peña y Enrique Piñeyro, entre otros.
Como suele suceder en los relatos del escritor, presenta una situación cotidiana que se enrarece paulatinamente. Así, la vida tranquila del relojero Lucio Bordenave (Machín) en el laberíntico barrio de Parque Chas cambia cuando su esposa (Goris) debe ser internada en un instituto psiquiátrico, regenteado por el misterioso dr. Samaniego (Belloso).
Hay más de una docena de versiones cinematográficas y televisivas -de calidad despareja- de textos de Bioy, pero las más notorias por su alcance internacional son las dedicadas a La invención de Morel. La primera El año pasado en Marienbad (Alain Resnais, 1961), donde no se reconoció su autoría, y la segunda L’Invenzione di Morel (Emilio Greco, 1974), rodada en Italia.
Las mejores son de directores nacionales: Invasión (Hugo Santiago, 1969), La guerra del cerdo (Leopoldo Torre Nilsson, 1975) y El sueño de los héroes (Sergio Renán, 1997). Y esperemos que esta de Chomski pase a engrosar la lista.