Millenium 3 no llegó a las salas y se editó directamente
en DVD

La Reina
en el palacio de las corrientes de aire (Luftslottet som sprängdes;
Daniel Alfredson, 2009) es la última parte de la trilogía
Millenium, basada en las exitosas
novelas homónimas y rodadas en coproducción por Suecia, Dinamarca y Alemania.
En el país se iba a exhibir en salas comerciales como los dos films anteriores,
pero el anuncio de una versión “americana” dirigida por David Fincher y
protagonizada por Daniel Craig, parece haber provocado “el pase” a DVD y dejado
a los espectadores con las ganas.
La acción comienza con la hacker Lisbeth Salander (Naomi Rapace) bajo arresto, reponiéndose
de las graves heridas provocadas por el encontronazo con el guardaespaldas
gigante del asesino Zalachenco y a punto de ser enjuiciada por una larga lista
de supuestos crímenes.
El juicio alarma a los policías corruptos, que tuvieron tratos con Zalachenco
en el pasado y quieren verla muerta o encerrada de por vida.
Pero el periodista Mikael
Blomqvist (Michael Nyqvist) -uno de los pocos amigos de la elusiva joven- investigará
e intentará salvarla a toda costa.
El guión lo firman Rasmus Heisterberg y Nicolaj Arcel, los mismos que tan buen
trabajo de poda hicieron en la extensísima primera novela y que volvieron a
hacerlo en la trama abigarrada y llena de ramificaciones de la tercera. Para
ello, quitaron muchos entuertos periodísticos y conservaron sólo la línea
principal del relato, destacando las escenas en el tribunal con la protagonista
en el banquillo de los acusados, enfrentando a jueces y villanos en todo su
esplendor punk.
Repiten los actores principales y el director Daniel Alfredosn, de buen -ni horroroso
ni sobresaliente- desempeño en la anterior entrega y en ésta, al mantener la cohesión
visual -mucha oscuridad- y una alta dosis de acción.
Un interesante thriller escandinavo, que refleja la obsesión del periodista y
escritor Stieg Larsson por desenmascarar a la ultraderecha, el tráfico de
personas, la violencia familiar y otras miserias de la no tan impoluta sociedad
sueca.