En la noche de su propio cumpleaños la tan bella como arrogante Theresa se
dirige a una fiesta en la universidad y mientras cruza el campus un enmascarado
la persigue y luego la asesina.
Comienzo común de tantísimos títulos dramáticos o de terror, pero después del último
estertor la víctima despierta a la misma hora y el mismo día para revivirlo todo
con el mismo luctuoso desenlace.
Un rulo o bucle temporal sin la angustia del de Ocho minutos antes de morir (Duncan Jones; 2011) o la ternura del
de Hechizo del tiempo (Harold Ramis;
1993), hasta el momento la mejor expresión de este recurso.
Estructuras recurrentes como estas requieren de un guion tan compacto como
certero, porque cuantas más veces se recuenta la historia más cerca está de
aburrir.
Eso sucede sin importar los pequeños cambios incluidos, que en este caso
muestran los desesperados intentos de la protagonista por de averiguar quién es
su verdugo y burlar su destino.
Domina el tono de comedia terrorífica y el humor negro slasher estilo Scream: Vigila quien llama (Wes Craven;
1993), pero después de la decimoquinta vuelta de ese castigo parecido a los
clásicos de Midas, Prometeo o Sísifo el espectador está bastante harto.
Lo mejorcito pasa por la graciosa elisión temporal donde Theresa va curtiéndose
y cambiando ¡a fuerza de morir!; el descubrimiento de Jessica Rothe -aunque había
hecho un secundario agradable en La La
Land (Damien Chazelle; 2016)-, que consigue que además de correr y gritar su
personaje describa un arco desde odiada integrante de una fraternidad a chica
capaz de enfrentar su situación y un final que recoge la mayoría de los hilos
sueltos.
Feliz día de tu muerte difícilmente
entre a la historia del cine de terror, pero es uno de esos largometrajes que
hacen buena yunta con un balde de pochoclo.

Título original: Happy Death Day
Director:
Christopher Landon
Guión: Scott Lobdell
Fotografía: Toby Oliver
Música: Bear McCreary
Intérpretes: Jessica Rothe, Israel Broussard, Ruby Modine
Origen: USA – 2017
Clasificación: Sólo apta mayores de 13 años, con reservas