Balance de la 8va. edición del Festival de Cine Argentino de Buenos Aires.

Entre el 11 y el 23 de abril tuvo lugar el BAFICI, festival que tiene un lugar preponderante entre las muestras internacionales y el primero ente las nacionales; como lo atestiguan los casi 250.000 espectadores que convocó en sus diferentes sedes y ciclos.
Este es el segundo año bajo la dirección artística de Fernando Martín Peña, que sorprendió pidiendo -y consiguiendo- que se adjudicara sólo dos premios por sección.
Durante una breve ceremonia en el Shopping Abasto, se adjudicó el primer premio de la Sección Oficial Internacional al film mexicano En el hoyo, de Juan Carlos Rulfo -hijo del recordado escritor de Pedro Páramo y El llano en llamas-, y al alemán Sehnsucht-Longing, de Valeska Grisebach el segundo.
En la Sección Oficial Argentina ganó Glue, historia adolescente de Alexis Dos Santos, y Soledad al fin del mundo, de Fernando Zuber y Carlos Casas.
También se otorgaron menciones a la actuación y música de Gabriela Moyano en El Amarillo; a Juan Villegas por la adaptación, guión y dirección de Los Suicidas; y al trabajo de edición de Alejo Moguillansky y los jóvenes directores de A propósito de Buenos Aires.
El jurado de la Selección Oficial de Derechos Humanos premió a Pavee Lackeen: a traveller girl de Perry Ogden (Irlanda); y la Fipresci galardonó como Mejor Película de la Sección Oficial Internacional, al documental argentino Los próximos pasados de Lorena Muñoz.
Un resultado final muy positivo a pesar de las polémicas alrededor del nivel de los films nacionales presentados.