La
intención del gobernador bonaerense Daniel Scioli de modificar el Código Fiscal
y quitar la no sujeción del sector cooperativo respecto de la carga tributaria
por Ingresos Brutos sigue generando reacciones entre los referentes de la
economía social.

Con las últimas horas de abril, el gobernador
bonaerense Daniel Scioli volvió a la carga con una iniciativa que ya había
fracasado en noviembre último: el envío a la legislatura de un proyecto de ley
por el cual propone modificar el Código Fiscal de la provincia, eliminando la
no sujeción del sector cooperativo respecto de la carga tributaria por Ingresos
Brutos.
La reforma impositiva que impulsa Scioli pretende derogar la no sujeción en el
Impuesto sobre los Ingresos Brutos de las operaciones entre las cooperativas y
sus asociados. De esta manera, de ser aprobado, afectará gravemente la
actividad de las cooperativas de consumidores y de trabajo, e inclusive a las
eléctricas y de servicios que realizan operaciones de ventas minoristas.
Además, con ello, se violaría la propia Constitución provincial, que reconoce
el trabajo cooperativo y le otorga un trato diferenciado en materia impositiva.

Respuestas
La iniciativa sciolista ya había generado rechazos el año pasado, en
oportunidad de ser presentada por primera vez. En este caso, las repercusiones
no se hicieron esperar. La Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro)
y la Confederación Cooperativa de la República Argentina (Cooperar), dos de las
más importantes organizaciones del sector en el país, emitieron un documento en
que critican el proyecto.
Las entidades expresaron que esta actitud del gobierno provincial constituye
una inexplicable discriminación montada sobre la falacia de la “competencia
desleal” que implicaría el hecho de que los consumidores hayan decidido
asociarse en defensa de sus intereses económicos, actitud promovida por la
misma Constitución en su artículo 38.
Además, destacaron que “la medida proyectada, que va en perjuicio del eslabón
más débil de la cadena económica y desconoce la precisa definición dada por la
Suprema Corte de la Provincia sobre esa particular naturaleza de los actos
cooperativos, implica un retorno a las políticas contrarias a la economía solidaria
que en su momento fueron impuestas por el Fondo Monetario Internacional a
nuestro país”.
A estas voces se sumó posteriormente la del Consejo Directivo de la Federación
de Cooperativas de Electricidad y de Servicios Públicos de la provincia de
Buenos Aires (Fedecoba), que preside el pringlense Ariel Guarco.
Guarco expresó que “resulta inexplicable que luego de haber sido rechazada la
reforma del Código Fiscal por los legisladores, ahora el Poder Ejecutivo
provincial intente impulsar lo mismo a través de una ley”.
Por otra parte, aseveró que “dada la gravedad de la medida impulsada por el
gobernador, el Consejo de Administración de Fedecoba, reunido en la ciudad de
Azul, rechazó terminantemente la reforma y recordó que va en detrimento de las
conquistas logradas a partir de la Ley 13.360, en donde se reconoce el
importante papel del cooperativismo en el desarrollo de la economía social”.
“Más aún cuando recientemente el gobernador Scioli compartió con las
cooperativas un acto en Bahía Blanca, en donde valoró la influencia positiva
del sector, cuyo espíritu es la búsqueda de la rentabilidad social”, agregó
Guarco.
En efecto, en su paso por nuestra ciudad y en oportunidad de conmemorarse el
Año Internacional de las Cooperativas, el mandamás provincial había ponderado
el trabajo cooperativo que, sostuvo, ejerce una “influencia positiva” sobre la
sociedad y la economía. En dicha ocasión, el titular del Ejecutivo bonaerense
se comprometió además a “seguir trabajando para generar los instrumentos
necesarios” para el desarrollo del sector. En el mismo acto, el presidente del
Consejo de Administración de la Cooperativa Obrera Rubén Fillottrani, le
recordó el articulado que la Constitución Bonaerense destina al sector. Se ve
que Scioli es de memoria corta.