La Obra Salesiana de La Piedad enfrenta la emergencia alimentaria de los
sectores populares de manera articulada con organizaciones sociales y políticas
y el estado municipal en su Delegación Noroeste.

El contexto actual complejizó
sustancialmente la situación económica de los sectores populares. En Noroeste y
en muchos barrios de la ciudad changarines, jornaleros y cuentapropistas tienen
grandes dificultades para acceder a algo tan básico como es la alimentación.
“Se están asistiendo a más de tres mil familias en el sector y desde La Piedad
lo que hacemos es ir acompañando a algunos comedores que necesitan apoyo, sobre
todo en el sector de Tierras Argentinas, Maldonado y Costa Blanca”, expresó
Diego Fonseca, responsable de la Obra La Piedad, quien aprovechó la entrevista
para agradecer el compromiso y la colaboración de la comunidad bahiense.
En el marco de la crisis alimentaria, La Piedad como actor social barrial
empezó a trabajar en la mesa del sector Noroeste que articula a distintas
organizaciones, el estado municipal y el provincial. Se trata de una instancia
de diálogo, acuerdos y planificación conjunta en pos de incidir colectivamente
en todo lo que pueda ayudar y mejorar la situación del barrio.
“A partir de la mesa, surgió la inquietud de abrir un punto de comida caliente
en la Capilla Santa Lucía y desde ahí se están elaborando viandas para
alrededor de 100 familias. Se está evaluando continuar la propuesta. La Piedad
y la comunidad de Santa Lucia ceden el espacio e interactúan muchas
organizaciones sociales y políticas”, reseño Fonseca.
El trabajo territorial de la Obra La Piedad data de hace mucho tiempo. No
obstante, en tiempos de pandemia continúan acompañando a las familias desde
Cáritas, desde el apoyo a comedores y merenderos, con la entrega de bolsones de
alimentos y el trabajo en red.