©Todos los derechos compartidos

Inclusiones
Textos en lengua Braille, audiolibros y voluntarios son las fortalezas de esta biblioteca destinada a crecer para brindar sus servicios.

Textos en lengua Braille, audiolibros y voluntarios son las fortalezas de esta
biblioteca destinada a crecer para brindar sus servicios.

“En su origen es biblioteca popular especial, popular porque está abierta a
la comunidad y especial porque el material que manejamos está destinado
especialmente a las personas ciegas o con disminución visual”, introduce
Viviana Dessous L’ Eglise, bibliotecaria profesional a cargo de la Biblioteca
del Centro Luis Braille.
Los audiolibros son parte de la biblioteca parlante, “se utilizan respetando la
propiedad intelectual y se utilizan para personas con discapacidad visual”. El
libro escrito en Sistema Braille es uno de los capitales de esta biblioteca,
“es más complejo porque no todos saben leer en Braille, no hay material tan
nuevo para que ellos trabajen”, agrega la profesional. Tampoco han contado con
actualizaciones que permitan ampliar la biblioteca con novedades. “Se hace
transcripción a Braille de determinadas materias para la Universidad, dos
chicos, Juan y Emilio, que están en el taller hacen las impresiones de
distintos libros, ya sean de estudio, cartelería, cartas de menú para
restaurantes, el año pasado para las jornadas de Inclusión de la Universidad
Nacional del Sur, que se hicieron en Rondeau 29, la señalética se hizo en el
Centro Braille, la idea es, según nos han informado, hacer toda la señalética
para todos los edificios de la universidad”.
El aprendizaje del Sistema Braille es complejo, el Centro se ocupa de dictar el
taller, “hay estudiantes de Educación Especial, interesados y curiosos, y
requiere mucha práctica”. A esta cuestión sumamente específica, se le agrega la
disminución de otras facultades en los adultos mayores, la pérdida del tacto,
puesto que la lectura del Braille requiere una gran sensibilidad.

Voluntariado
Hay voluntarios que realizan su aporte dentro de la Biblioteca, están
organizados en turnos, su función práctica es grabar material bibliográfico,
tarea que se lleva a cabo priorizando las necesidades de las personas que se
están rehabilitando, de acuerdo a sus gustos y sus proyectos, por ejemplo,
algunos de ellos son estudiantes universitarios. “Mi tarea en la biblioteca es
muy linda, aparte del trato con el usuario que viene existe un gran intercambio
con el voluntario, es muy ameno porque lo ves toda la semana y a veces, les
pedimos colaboración fuera de la tarea que ellos hacen, no solo vienen a
grabar, ayudan a algún usuario con un trámite, se involucran con la gente de la
institución, realizan algún paseo”, reflexiona la bibliotecaria, quien comparte
el compromiso con María Elena Busso. “Es muy importante dedicarles tiempo y
espacio, cada uno viene a grabar en el turno asignado, a veces demanda un
acompañamiento”. Este sector es dinámico, algunos de ellos realiza una tarea
esporádica y otros se quedan, conocen más a los integrantes y asistentes a la
rehabilitación”. De estos últimos, Osvaldo ha dedicado 20 años al trabajo
colaborativo.
“Tenemos estudiantes de las carreras de Abogacía, Química y Biología, el
voluntario lo ayuda, por ejemplo hay un muchacho que no se adapta a escuchar y
prefiere que el voluntario le lea y hablarlo con él, y esto se atiende, son
demandas específicas”. Con una atención de necesidades particulares, la
diversidad de usuarios se multiplican, como las tareas alrededor de la
bibliografía lo hace, “también atendemos a usuarios que están realizando sus
estudios secundarios, muchos de ellos, cuentan con nuestras lecturas y
compromiso para acompañar su actividad”.

Crecer con otros
El año pasado fue muy significativo para la Biblioteca del Centro Luis
Braille, “elevamos un pedido al Rotary Club Norte Bahía Blanca, que estaba
presidido por el Dr. Oscar Mele, le presentamos un proyecto para solicitar
equipamiento informático, el mismo destinado a la biblioteca pensando en la
digitalización del catálogo, para darle visibilización, para que esté en
internet”. En primera instancia, se firmó un convenio marco con la biblioteca
central, “lo que se viene haciendo con otras bibliotecas de la ciudad, entonces
desde este punto estamos trabajando desde diciembre, esperando conseguir
siempre mayores logros”. El Rotary Club donó lo solicitado, y este año en el
mes de junio recibieron la noticia de que un contacto con Rotary de Zaragoza
logró la donación de 16 mil audiolibros, que estos últimos habían digitalizado
para donar a La Once, la organización nacional de ciegos de España. “Esto se
oficializó en un acto y nos entregaron un disco externo, estamos evaluando el
material, vimos hasta el momento que es muy bueno porque es Literatura
Universal, incluye Filosofía, Literatura Latinoamericana, Literatura
Argentina”. Una de las cuestiones a resolver es cómo se realizará el préstamo
de los mismos, “tenemos muchas ganas de ponerlo ya al servicio de las
personas”. La sede realiza préstamos domiciliarios y tiene una sala de
consultas y lectura, asimismo, se organizan talleres, enseñanza de la escritura
Braille y encuentros.

VISITAS
Hay visitas organizadas para quienes quieran recorrer la institución, “lo
que más les gusta es el Taller Protegido, estar en contacto con los asistentes,
esta parte impacta, y los alumnos quieren probar hacer un cepillo, no pueden
creer cómo lo hacen, realmente para los escolares es muy rico, se destaca el
contacto con el otro. Las personas que asisten al Taller les comenta cuáles son
sus dificultades y explican cómo tienen que actuar cuando los encuentran en la
calle”. Se puede solicitar en la sede de Thompson 44, por teléfono al 4514752,
vía correo electrónico: [email protected].

CONSEJOS
Si una persona ciega o con disminución visual requiere su ayuda es
importante tener en cuenta que debe esperar el pedido, luego del cual ofrezca
su hombro como guía del otro cuerpo, no lo tome del brazo. Escuche atentamente
a la persona, hay casos donde le solicitarán el dato de una parada de colectivo,
o solamente se deseará cruzar la calle ya que están orientados. Si se encuentra
esperando un transporte público, pregúntele qué línea quiere tomar y avísele
cuando ésta llegue. Responda a las necesidades requeridas, en la ciudad es
frecuente ver a personas con bastón blanco, algunas de ellas son ciegas y otras
disminuidas visuales, pocas de estas últimas utilizan el bastón verde.

facebook
Twitter
Follow
2018-09-18 00:00:00
Etiquetas: Instituciones.
Relacionados
ESTEMOS CONECTADOS
campañas
144 600x600px (1)
137 (1)
adhesiones
adhesion facundo 600x325px (1)
adhesion lopez 600x325px (1)
última Edición
Cooperativa Ecomedios
Nos apoyan
Nosotros
Ecodías es una publicación de distribución gratuita.
©Todos los derechos compartidos.
Registro de propiedad intelectual Nº5329002

Los artículos firmados no reflejan necesariamente la opinión de la editorial.
Agradecemos citar la fuente cuando reproduzcan este material y enviar una copia a la editorial.

> Directora
Valeria Villagra
> Secretario de redacción
Pablo Bussetti
> Diseño gráfico
Rodrigo Galán
> Redacción
Silvana Angelicchio, Ivana Barrios y Lucía Argemi
> Difusión en redes sociales
Santiago Bussetti y Camila Bussetti
> Colaboradores
Claudio Eberhardt


es un producto de:

Matrícula INAES 40.246. 

Desarrollado por Puro Web Design.

RSS
Follow by Email
Telegram
WhatsApp